Tendencias en terceros espacios 2025: flexibles, humanos y sostenibles.
Los terceros espacios están redefiniendo nuestras ciudades y modos de vida. Ni hogar ni oficina, estos lugares intermedios —cafeterías, bibliotecas, vestíbulos, coworkings o centros culturales— combinan lo mejor de ambos mundos.
¿Qué son los terceros espacios?
El término "terceros espacios" hace referencia a aquellos lugares que no son ni el primer espacio (el hogar) ni el segundo (la oficina), pero que cumplen una función social, laboral y emocional cada vez más relevante. Estos espacios de convivencia permiten trabajar, relacionarse, descansar o incluso formarse, con una atmósfera acogedora y estimulante.
La teoría de los terceros espacios de Ray Oldenburg
El concepto fue desarrollado por el sociólogo Ray Oldenburg, quien propuso que los terceros espacios son fundamentales para la vida en comunidad, ya que fomentan la interacción informal, la pertenencia y la creación de vínculos sociales. Según Oldenburg, lugares como cafeterías, librerías o plazas públicas permiten a las personas reunirse con facilidad y de forma accesible, fuera de las presiones del hogar y del trabajo.
Hoy, esta teoría cobra especial relevancia para arquitectos, interioristas y proyectistas, quienes diseñan entornos que promueven la conexión humana y el bienestar emocional a través del diseño.
Principales tendencias en los terceros espacios en 2025
Flexibilidad total: espacios multipropósito
En un mundo cada vez más dinámico, donde la rapidez y los entornos compartidos predominan, la búsqueda de comodidad, tranquilidad y privacidad se vuelve esencial. En este contexto, contar con soluciones innovadoras para equipar este tipo de espacios puede ser un gran valor añadido y diferencial para las empresas.
Diseño experiencial y emocional
El diseño ya no se percibe solo con los ojos. La neuroarquitectura, la cromoterapia, las texturas, los aromas y una acústica cuidada crean entornos que provocan emociones. La tendencia apunta a espacios que calman, estimulan o reconfortan, pensados para estancias prolongadas y bienestar duradero.
Terceros espacios como red de trabajo descentralizada
En el contexto del trabajo híbrido, los terceros espacios operan como micro hubs descentralizados, ideales para profesionales móviles. Espacios como workcafés o coworkings nómadas permiten trabajar cerca de casa, fomentando la conciliación y reduciendo los desplazamientos.
Estética acogedora y doméstica
La línea entre hogar, trabajo y ocio se difumina. La tendencia pasa por espacios con materiales naturales, tapicerías confortables, iluminación cálida y una atmósfera cercana. Espacios que invitan a quedarse, a crear, a compartir.
Conexión entre lo físico y lo digital
Los terceros espacios se están volviendo phygital: cargadores inalámbricos, sensores de ocupación, iluminación inteligente o control ambiental conectado. La tecnología integrada mejora la funcionalidad, la eficiencia energética y la interacción en tiempo real.
Sostenibilidad como valor inherente
La sostenibilidad no es una opción, es un criterio básico. En 2025, los terceros espacios se diseñan con materiales reciclados y locales, se optimiza el consumo energético y se aplican principios de economía circular. La belleza está también en el impacto positivo.
Ejemplos de terceros espacios
La importancia de la organización en terceros espacios
Un buen tercer espacio no es solo cuestión de diseño, sino también de organización funcional. La zonificación, el flujo de circulación, la señalización intuitiva y la integración de servicios son claves para que estos entornos sean realmente usables y agradables para perfiles diversos.
Diseñar con visión estratégica permite optimizar el uso del espacio, fomentar la interacción y asegurar una experiencia equilibrada entre privacidad y comunidad.
Life Friendly Spaces: Diseñar con propósito
Estos valores están completamente alineados con nuestra filosofía de diseño de LifeFriendly Spaces: espacios creados para cuidar de las personas, fomentar la comunidad y mejorar la calidad de vida a través del entorno. Como filosofía, LifeFriendly Spaces no solo define cómo diseñamos, sino por qué lo hacemos. Nos guía para crear entornos donde las personas se sientan bienvenidas, motivadas e inspiradas a compartir, colaborar y crecer, independientemente del tipo de espacio que habiten.






